VII. TEOTIHUACAN

Ese día había preparado un brebaje diferente, había utilizado semillas de ololiuqui, unas flores que crecen como enredadera por todo México y que prácticamente son los hongos de las regiones áridas por su contenido de LSA. Se toman todas las semillas que quepan en una taparrosca de refresco y se muelen. Se dejan remojar en agua por 24 horas y se toma frio. Esta técnica era utilizada por los adivinos mixtecos y zapotecos.

Los efectos de este alucinógeno son muy suaves, da la impresión de encontrarse en un estado de comunión con el entorno. Uno se vuelve más consciente a la presencia de cualquier tipo de energía. Así que decidí meditar en lo alto de la pirámide del sol, pensar en las posibilidades que tenia aquel lugar y porque se daban estos torrentes magnéticos.

La energía del pensamiento trabaja a niveles cuánticos, nuestros procesos cognitivos resuenan a frecuencias de niveles dimensionales muy inferiores. Para entender esto se debe comprender lo que es taquion y cómo es que la mente los genera.

Un taquion es una unidad matemática hipotética capaz de moverse a velocidades súper lumínicas. En términos de la teoría de relatividad esta unidad tiene masa y tiempo como números imaginarios para cumplir la ecuación de Einstein. Tiene el curioso efecto de que su velocidad aumenta cuando su energía decrece, similar a una idea propagándose por el subconsciente colectivo. Pueden violar el principio de casualidad, el cual nos dice que para todo efecto hay una causa, pero los taquiones pueden viajar al pasado y modificarlo sin modificar el presente dada su naturaleza.

La existencia de tal partícula es un resultado de la inestabilidad vacio temporal, porque esta tiene un máximo energético en vez de un mínimo como podría pensarse, existe más energía en el vacío que en la materia, el más pequeño impulso puede inducir a una concentración de taquiones en el vacío. Una condensación de estos elementos causa una reducción en su energía potencial convirtiéndose en bosones de higgs con masa positiva, partículas observadas durante las colisiones de átomos en el laboratorio suizo del CERN. El taquion es una inestabilidad en el vacío que induce a otros estados energéticos. 

Una condensación de taquiones puede inducir actividad energetica en un espacio y tiempo dictado por la imaginación humana. Este tipo de conocimientos eran utilizados hace más de 12000 años en la Atlántida. La tecnología estaba orientada a canalizar los taquiones del cerebro hacia un amplificador que pudiera afectar la materia. Estos conocimientos fueron usados por las antiguas civilizaciones en sus comienzos y se fueron perdiendo a través del tiempo por la ignorancia humana.

Para la imaginación humana no existen límites, es el origen de todo nuestro intelecto, es nuestra consciencia. El tiempo y la materia no están realmenente definidos cuando imaginamos, si no hasta tiempo después que las probabilidades se acotan y nuestro pensamiento se vuelve tangible. El ser humano no puede hacer algo a voluntad si antes no lo imagina, tal como lo dijo descartes en su tiempo. El mundo en el que vivimos actualmente es el resultado de la energía taquionica del pasado, nuestro imperio tecnológico fue construido antes por el pensamiento.

Un ejemplo de esto es la máquina para hacer llover. Un gran cuarzo era colocado en la cima de una pirámide alineada a un vórtice electromagnético. Este cuarzo era calentado por el sol en su cenit y por una serie de espejos que acumulaban la energía solar sobre el cuarzo, calentándolo todo lo posible para que este gigantesco mineral perfectamente pulido resonara a gran intensidad con la energía del sol. Se codificaba información en su base, un pensamiento canalizado haciendo uso de un método visual intensamente imaginado y coordinado con los otros sacerdotes. Debían ser figuras fractales geométricas, una combinación de la estrella hexagonal de la kabala hebrea con el triangulo de sierpinski. El resultado de insertar un pensamiento en cada pequeño triangulo de esta dinámica visualización acarreaba que las nubes se condensaran por el efecto de los bolsones de higgs subiendo a la atmosfera y causando cambios en la temperatura.

La construcción de tales maquinas requería un compartimento dentro de la pirámide, allí se encontraba el grupo codificador, esta parte del cuarzo que era la más pequeña y angulada permanecía sin luz solar y en contacto con la frente de los codificadores. Así se formaba un circuito de resonancia cuántico. Los cuarzos son semiconductores de energía taquionica, donde nuestros pensamientos actúan como compuerta de este transistor cuántico y la energía otorgada por el sol se modula bajo el pensamiento humano, el cuarzo entonces actúa como transductor de energía taquionica a electromagnética diseminando las ondas cuánticas en un campo de emisión otorgado por la energía libre solar.

La vieja tradición ocultista de curar con cuarzo proviene de este hecho. El cuarzo absorbe la energía taquionica del codificador y la retiene mientras se descarga, al ponerse el cuarzo al sol este se potencializa y emana ondas con más potencia distribuyendo la codificación sobre el entorno.

Se trata de una  tecnología muy avanzada que puede tener repercusiones terribles haciendo un mal uso de ella, que es lo que paso en la Atlántida. El centro del imperio atlante tuvo lugar en la luna fue un gran proyecto llamado tiamat que alguna vez sometió a toda la tierra privándola de su energía lumínica indefinidamente, este hecho acarreo una guerra mundial y una inundación en toda la tierra, recordada en los mitos nativos y en la biblia. 

La historia antigua sumeria narra la historia de tiamat, este satélite eclipsaba a la tierra y recibía la energía lumínica en un receptor ubicado en su cara oculta, así recibía los rayos del sol con más intensidad que en la superficie terrestre. Esta concentración directa de energía pudo haber activado una red de cuarzos enormes que generaran un campo taquionico tan poderoso que los hombres inmersos en el tuvieran capacidades divinas con su pensamiento. Este lugar pudo haber sido lo que conocemos como el Olimpo griego, la ciudad de los dioses. El rey de esta civilización fue un extraterrestre conocido como marduk y fue el primer ser sobre la tierra en proclamarse como dios. 

Estos extraterrestres llegaron hace mucho tiempo como refugiados a la tierra con la civilización de aquel entonces conocida como lemuria, la naturaleza de estos extraterrestres era muy peculiar ya que carecían de sentimientos, estaba altamente tecnificados y no podían sobrevivir sin combustible. Eran lo más parecido a un robot orgánico y jamás pudieron entender la naturaleza lemuriana y su conexión con la madre tierra. En cuanto entendieron los conceptos de la energía lumínica usaron sus naves para establecer una base lunar. La corteza lunar fue modificada con detonaciones creando un profundo cráter en una de sus caras, esta es la razón por la cual solo vemos una cara de la luna ya que su densidad no es uniforme y la parte deformada apunta siempre hacia el exterior que es donde se encontraba la central lumínica. Con tal energía podían mover a la luna como si fuera una nave hasta colocarla en una posición precisa de eclipse permanente, con anterioridad la luna orbitaba más lejos y no eclipsaba por completo al sol.

Tras el gran fracaso de este sistema con la intervención de la madre tierra cambiando su giro, la luna perdió su poder quedando atrapada por la gravedad terrestre dejando como legado la modificación de la precesión de los equinoccios y de los eclipses, donde cada uno de ellos es el recuerdo del imperio lumínico de tiamat. El comienzo de esa nueva era de libertad solar para la tierra fue conocida por el primer sol en los relatos de México antiguo y el fin de la era glaciar en los datos científicos. Los atlantes sobrevivientes se encargaron de establecer un orden para regresar el espíritu planetario a lo que era antes.

La tecnología de cuarzo se perdió por la avaricia e ignorancia de los conquistadores de las guerras antiguas. Fue hasta hace poco que un científico premio nobel llamado marcus vogel redescubrió para la ciencia las propiedades de resonancia del cuarzo. Ahora este mineral es usado en todas las computadoras del mundo para sincronizar sus microprocesadores. Este alternativo investigador fue desestimado por la comunidad científica ortodoxa por afirmar que los cuarzos también eran sensitivos al pensamiento. Esto se debe a que el electromagnetismo del pensamiento encaja en la estructura molecular del mineral.

Marcus vogel diseño un modelo de cuarzo para maximizar sus efectos como antena emisora, la parte hembra del cuarzo es la pequeña, del mismo Angulo que las pirámides de giza. El cuarzo debe tener un efecto sobre los taquiones de acuerdo a su forma geométrica, pudiendo actuar como antenas en algunos casos. La ciencia atlante se encargaba de los efectos vibratorios del pensamiento de acuerdo al tipo, estimulación y volumen del cuarzo.

Las sales celulares, los tejidos grasos, la linfa, los glóbulos rojos y blancos y la glándula pineal, son estructuras cristalinas que forman un sistema completo en el organismo, de manera que podríamos decir del ser humano que es un cristal vivo. De tal manera que el trabajo de estas maquinas lumínicas también afectaba a los seres vivos.

Una tecnología de ese calibre es similar a darle dinamita a un grupo de chimpancés, la emisión cuántica afecta directamente las probabilidades de que un femonomeno deseado se vuelva realidad. Estas ondas pueden viajar a través de un vórtice electromagnético hacia la atmosfera y diseminar su vibración por todo el planeta, es como sembrar una idea en toda la materia obscura. Esta súper tecnología tenía un fin más profundo que el de simplemente brindar electricidad a los hogares o combustible para sus transportes. Se trataba de poder manipular la materia con el pensamiento para recrear el jardín del edén que existió aquí antes de la Atlántida. Se usaban todos los medios posibles de amplificación para darle potencia a un generador taquionico como podría ser la consciencia humana.