XI. LA SANGRE DEL CRISTO

La sociedad esta terriblemente enferma, nuestras dietas y medio ambientes definen la capacidad neurológica de los individuos. El dejar de consumir DMT a lo largo de la historia nos ha hecho involucionar a una especie limitada con déficit de imaginación. El daño es comparable a visualizar al ser humano con la misma dieta del típico gordo americano por 2,700 años. El DMT es tan importante en nuestra dieta como el calcio, sodio o potasio para un correcto desarrollo biológico,  esta evolución espiritual la cual no consiste en creer la existencia de un dios sino es en la capacidad de tener una consciencia superior, el desarrollar un órgano psíquico especializado capaz de elevar por los cielos nuestra intuición natural.

El establecer una secretaria gubernamental que este destinada al desarrollo de la glándula pineal en la sociedad es tan crítico como poner una secretaria de cultura o desarrollo humano. Esta fue la empresa original de las más antiguas religiones organizadas por lo tanto la destitución mundial del gobierno religioso actual no será posible hasta que se satisfaga esta necesidad social. La última revolución se convertirá en la evolución, el ser humano no podrá vivir en un estado anárquico y de bienestar social si no atiende sus necesidades neurológicas primero, necesitamos una intervención farmacológica para sanar.

El imperio espiritual radica en la incapacidad cognitiva individual de interactuar con la masa obscura. La incapacidad social de diseñar su propio medio ambiente, su propia cultura o su propio sistema de creencias. La degradación de la glándula pineal puede ser equiparable a un deterioro  imaginativo del ser humano, esto nos hace dependientes de los círculos culturales preestablecidos y por lo tanto define el estilo personal de vida de acuerdo a las interpretaciones de terceras personas. Esta matrix espiritual genera un individuo internamente dividido entre sus sueños y la realidad, la aceptación de la adaptación y el abandono del estado creador del ser humano.

El jardín del edén es el mundo donde cada ser humano toma el rol de su propia imaginación y por lo tanto diseña su vida de acuerdo a sus propios sueños y creencias. Donde cada individuo sea un ser único y especializado, un universo paralelo al material. Un estado creativo colectivo que a larga terminaría produciendo un entorno cultural muy enriquecido y  nos liberaría de la fábrica de producción en masa. Este es el mundo donde el ser humano vale por lo que es y no por lo que tiene, un estado social que solo podría alcanzarse si entendemos nuestras desigualdades neurológicas sociales causadas por limitaciones en la dieta con fines de control.

La raza aria a la que se refería frederic nitzchie, no es una etnia en específico. El superhombre es aquel que desarrolla su tercer ojo al máximo, los grupos masónicos de la edad media guardaron estos conocimientos por debajo de la tutela eclesiástica y eso permitió el arribo de la ilustración. Los hiperbóreos, la raza superior solo será posible cuando todos miremos hacia nuestro propio desarrollo personal, dejemos de lado nuestro ego y comprendamos que nuestra biología cerebral está limitada para comprender la materia obscura y simplemente nos abramos a ella sin miedo.

El ser humano promedio dentro del sistema tiene un tremendo miedo a explorar otros estados alterados de consciencia, renegamos de la sabiduría otorgada por las plantas y creemos que somos superiores. En cambio somos hipócritas porque sin ciertos estados alterados producidos por el alcohol, el tabaco y el azúcar no podría sustentarse el sistema actual, está comprobado que estas tres drogas son verdaderas adicciones dañinas para la salud. La falsedad social se extiende mas al descubrir que toda nuestra comida y agua contienen elementos toxicos producto de nuestro entorno industrializado, hay muchísimos estudios que demuestran que nos estamos envenenando con nuestra propia ciencia. Si vivimos entonces en un mundo intoxicado cual es el temor a este tipo de plantas.

La cultura es nuestro sistema operativo del cual el consumidor no pueda escapar, no hace falta alabar a los dioses ya que para nosotros estos son personajes producidos por la industria mediática. Los nichos de mercado son los cultos modernos y los medios masivos alimentan esta necesidad como modernos sacerdotes a favor del dinero. Los bancos son nuestros templos espirituales donde cada uno purga sus pecados producto de nuestro vacio interior, la necesidad de historias nuevas, música fresca o implantes tecnológicos está relacionada con nuestra verdadera naturaleza humana que busca estar en contacto con la sociedad y su energía colectiva. 

El sistema nos separa y encarcela alejándoos de los que nosotros comprendemos como comunidad y después nos vende esa necesidad a cambio de más trabajo. Seamos honestos con nuestros sentimientos y aceptemos que poco a poco nos están convirtiendo en robots a su servicio. El medio cultural separa por grupos de la misma manera que las religiones lo hacen. Es momento de parar y crear esto por nosotros mismos ya que los gobiernos, lo jerarcas religiosos o los productores mediáticos no lo harán por nosotros ya que somos su fuente de privilegios. 

Aquel día era el último eclipse solar del gran calendario maya, ese día estaba profetizado como el regreso de kukulkan que había comenzado con el tránsito de Venus algunos meses antes. Desde mi nueva perspectiva kukulkan era el culto por ese árbol que al parecer estaba regresando a la consciencia de la humanidad en una época de tecnificación masiva e industrialización contaminante. Me preguntaba qué consecuencias tendría el uso masivo del DMT en el mundo moderno, lo más probable es que algo similar a lo que ocurrió en los sesentas con ciertos alucinógenos y los movimientos sociales. Podría significar acaso el fin de las religiones y una anarquía espiritual que nos regrese a lo que entendemos en el fondo como humanidad.

Habían muchas dudas en mi interior, pensaba en las posibilidades de huertos secretos escondidos en la sierra, o de otros templos a lo largo de todo el mundo que también tuvieran una versión del árbol, este conocimiento debía llegar masivamente a la población moderna y no sabía si era el único loco que lo había descubierto. Debía llevarse a cabo una investigación pública sobre esta peculiar leguminosa, conocer el alcance del mito del santo grial. Tenía la teoría que el árbol podía curar a la gente combinando sus alcaloides psicotrópicos y sustancias potencializando la curación psicológica, de ser publico algo así pondría en riesgo toda la farsante industria farmacéutica, seria acaso el comienzo de un movimiento que nos regresara a la magia de las plantas decepcionados del fracaso del sistema sintético.

K'inich Kan Balam comenzó la reconstrucción con ayuda de los nativos a Uxmal, Mayapan y Chichen Itza aquí fue llamado por todos como kukulkan, enseñando a los nuevos mayas la escuela antigua de conocimiento. Les enseño como usar el árbol de tepezcohuite para fines rituales, los sacerdotes entendieron que solo prolongando su uso podrían proyectar sus pensamientos con ayuda de los cuarzos en las pirámides, les dejo códices llenos de conocimientos para que estos pasaran a sus hijos cuando el ya no estuviera. Así comenzó una mítica civilización que tendría una fuerte repercusión en la sociedad futura.

Kukulkan abandono entonces la península desde Tulum, viajo a Sudamérica donde continuo con sus instrucciones llegando hasta el Perú, de aquí viajaría mar adentro llegando hasta Malasia, luego a la India y finalmente completaría su recorrido llegando hasta Egipto para visitar el oráculo de Amon su antigua casa.

En este lugar fue recibido por los sacerdotes coptos supervivientes de la escuela de misterios del ojo de Horus, a los cuales se unió, aquí aprendería el lenguaje local y adoptaría el nombre de Jesús pues los sacerdotes lo identificaron como el mesías espiritual profetizado para la era de picis. Para este entonces kukulkan había estado diseñando un árbol especial a través de sus viajes, fusiono por medio de injertos varios tipos de mimosas creando una compleja especie. Esta nueva rama era única en el mundo y fue el resultado de una ingeniería botánica premeditada que tenía como fin combinar los alcaloides de varios árboles psicodélicos de distintas regiones del mundo. Este era el espino cruz, el cual no podía reproducirse por sí solo, había que injertar una de sus ramas dentro de un árbol de ceiba para que pudiera esparcirse y los iniciados bebieran su mágica sábila. 

Kukulkan aprendería todo sobre el entorno occidental y viajaría hasta Alejandría donde tendría que enseñar el uso del árbol a una civilización que se estaba corrompiendo por la ambición, esta ciudad era el punto clave para que sus enseñanzas se distribuyeran por todo el territorio helénico, la medicina espiritual estaba por llegar al imperio militar más poderoso del mundo. 

La ciudad de Alejandría acababa de ser tomada por julio cesar y su independencia había terminado, la intelectual reina cleopatra enemiga acérrima de los romanos  término por suicidarse para no ser llevada como esclava a aquella ciudad. Desde este momento la grandeza del reino helénico instaurado por Alejandro comenzó su declive sustituido por el bestial poderío romano que durante los siguientes 300 años demolería la ciudad causando varios genocidios. Alejandría quedo aislada del comercio exterior al no poder usar la moneda romana y se convirtió en el granero del imperio el cual tenía que enviar hasta allá un tercio de su cosecha total.

El comercio estaba monopolizado por los judíos, cuales se habían establecido en Alejandría 500 años atrás después de la toma de Jerusalén por Nabucodonosor II, desde este momento los judíos comenzaron a acumular grandes fortunas aprovechando las limitaciones comerciales instauradas por roma y fueron privilegiados, esta situación comenzó un antisemitismo en dicha ciudad propulsado por las colonias griegas que siempre habían mantenido un estrecho vinculo con los egipcios.

Kukulkan llego hasta las ruinas de la biblioteca de Alejandría donde conoció a un shaman local que todavía predicaba el uso psicodélico del árbol de acacia, lo conocían como Juan el bautista. Los restos de la edificación quemada era el punto de reunión de los sabios y predicadores del conocimiento en aquel tiempo. El bautista era judío y se había hecho famoso entre los sabios griegos que cada vez más se atrevían a probar de sus brebajes. La mayoría de judíos de aquel entonces solo estaban interesados en el oro y su popularidad era tanta que los sacerdotes de las otras religiones asistían a escucharlo con recelo.

Los líderes religiosos habían perdido todo poder con la llegada del gobierno romano y múltiples profetas y predicadores estaban sueltos por las calles de Alejandría desplazando poco a poco el culto originario egipcio al dios Horus. Los plebeyos comenzaron a cambiar de religión creyendo que solo un nuevo dios los salvaría de la opresión romana.

Kukulkan hizo amistad con Juan el bautista quien lo ayudo a distribuir su especie traída de oriente en los arboles de la región para que sus discípulos pudieran tener un acceso a su sábila. Esto propicio que la popularidad del bautista se incrementara tanto que mucha gente comenzó a seguirlo preocupando a los líderes religiosos quienes lo veían como un enemigo político.

Ante tal situación los sumos  sacerdotes judíos sobornaron al imperio para que estableciera una nueva ley, los cultos paganos estaban prohibidos, solo las religiones oficiales podían rendir culto a sus dioses. Con esta jugada los judíos que controlaban el flujo de dinero podían no solo monopolizar el comercio sino también la espiritualidad de la gente. Acto seguido el bautista fue ejecutado como prueba de la ley.

Kukulkan viajo a Jerusalén la capital judía y mercantil, desde este punto estratégico sus conocimientos podrían distribuirse por todas las tierras donde comerciaban los judíos, esto causaría un efecto dómino que no podría ser detenido después de su muerte, el cual no podía darse en el aislado y especialmente sometido Egipto.